Situación en Costa Rica
En Costa Rica, desde enero del año 1997, mediante el Decreto Ejecutivo 25700-MINAE, el guayacán real está clasificado oficialmente como una especie en peligro de extinción. Asimismo, está considerado como una de las especies forestales con poblaciones adultas más escasas.
De acuerdo con información emanada por el entonces Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio), con sede en Costa Rica, en 1990 se estimaba que la población de árboles adultos de guayacán real en el país escasamente llegaba a los 100 ejemplares.
Veinte años después, la población de árboles adultos seguirá siendo básicamente la misma, ya que veinte años es un período de tiempo muy corto en la vida de un guayacán real, pero, la gran diferencia ha de encontrarse en la mayor cantidad de árboles jóvenes de guayacán real que existen hoy en día en el país.
De manera particular, en las áreas protegidas en la provincia de Guanacaste, se aprecia una presencia relevante de arbolitos de guayacán real, que han venido surgiendo en los años recientes como resultado del régimen de protección de estas áreas.
De igual manera, en las décadas recientes, han surgido en el país -particularmente en la provincia de Guanacaste- iniciativas privadas muy valiosas que han promovido y popularizado la siembra del guayacán real. Probablemente la iniciativa privada más notoria es la del Proyecto Guayacán Real, desarrollado en la Finca San Lorenzo, en Bahía Salinas, cantón de La Cruz, provincia de Guanacaste, por la custodia del célebre y multi centenario guayacán real MAGÓN, y por haber sembrado más de mil arbolitos de guayacán real en el proyecto desde el año de 1993.
Igualmente, merece un reconocimiento especial la gran labor del Ing. Antonio Leigh, en la Ciudad de Cañas, en Guanacaste, quien preparó varios miles de arbolitos de guayacán real, que donó a diversidad de entes públicos y privados para contribuir a evitar la extinción del guayacán real.
Resulta muy positivo que la Municipalidad del Cantón de La Cruz haya declarado al guayacán real el árbol cantonal, siendo notoria la presencia de guayacanes reales en parques, jardines y calles de este cantón.